Entrevistamos a Pablo Almazán, el último jugador en renovar de cara a esta próxima temporada y que tan importante fue el pasado año en el ascenso del equipo. El alero andaluz habla de su renovación y expresa sus ambiciones tanto individuales como colectivas de cara a esta campaña.

La pasada semana Pablo Almazán renovaba su compromiso con el conjunto azulino, haciendo realidad su idea de continuar un año más en el Decano: “Renovar en Melilla era una de mis prioridades en verano. Es cierto que se han visto varias opciones pero el proyecto del club este año era de nuevo muy ilusionante para mi. Tengo ganas de volver a hacer historia y seguir siendo un equipo grande”.

El menor de la Almazán se convertía en la sexta renovación del equipo melillense de cara a la próxima temporada. Una clara apuesta por la continuidad del equipo que consiguió el ascenso y que el granadino valora de manera muy positiva: “La base respecto al año pasado ya la tenemos y eso creo que nos va a beneficiar, especialmente en el inicio de la pretemporada, porque ya la gran mayoría nos conocemos y el resto va a ser simplemente intentar adaptarlos al grupo lo más rápido posible”.

Precisamente respecto a las nuevas incorporaciones, Pablo Almazán cree que eran las mejores incorporaciones posibles: “Los nuevos jugadores son todos referencia en la liga y la conocen perfectamente. Creo que saben perfectamente que vienen a un club exigente y que quiere estar arriba. Creo han sido los recambios perfectos”.

Para esta próxima temporada, y a pesar de no poder consumar el ascenso logrado en la pista el pasado año, el alero nazarí apuesta por ser de nuevo ambiciosos: “Un jugador profesional tiene que tener metas. Si fue difícil lograrlo la temporada pasada, más difícil va a ser repetirlo esta y eso supone un reto y por lo que vamos a trabajar, pero sin ninguna confianza va a ser nada fácil porque hay equipos que se han reforzado muy bien esta temporada”.

En lo personal, espera seguir creciendo y ayudando al equipo a estar lo más alto posible: “Siempre intento trabajar día a día y hacer lo mejor para el equipo. Si te reconocen el trabajo genial, pero hay que ser ambicioso e intentar seguir creciendo, y sobre todo, ayudar al equipo a volver a estar arriba”.

“Al final son tres meses de verano que bueno desconectas algo pero el mono de la competición no te lo quita nadie y lo que queremos es competir”, concluye Almazán expresando sus deseos de comenzar ya a trabajar con el equipo.